En una entrevista al diario esloveno ‘Ekipa’, a dos días del Comité Ejecutivo de la UEFA, Aleksander Ceferin calificó como “una de las situaciones más graves que he visto”. El organismo futbolístico europeo anunció que iba a abrir una investigación al Barcelona y, según ha podido saber Mundo Deportivo, la semana pasada ya hubo visita de los investigadores a las oficinas del FC Barcelona en busca de información.
La UEFA está facultada, según el reglamento propio de la Champions (en su artículo 4.02) y su Regalento Disciplinario (artículo 31.4), para sancionar al Barcelona por el hecho de que haya indicios de actos destinados a influir en resultados de partidos, tanto si han sido partidos de competición internacional como nacional. Y para hacerlo no tendría por qué esperar el dictamen de un tribunal si lo considerase oportuno, según esos reglamentos.
Sin embargo, si lo hace se expone a la pérdida de una elevada suma de dinero, puesto que el Barcelona demandaría al organismo si hubiese exclusión de la Champions. Los reglamentos de la UEFA se contradicen, ya que por una parte dice que la UEFA ‘invita’ a los clubs a participar, pero en otros artículos estipulan que hay requisitos deportivos para competir en sus torneos. Es decir, la UEFA establece qué debe conseguir en sus torneos nacionales un club para competir.
El Barcelona, por lo tanto, tendría un ‘derecho adquirido’ ganado en el terreno de juego para jugar la Champions. No sería una invitación, sino un derecho adquirido. Si la UEFA atacase ese derecho del Barcelona, el club azulgrana acudiría a los tribunales de justicia. Y en el estado de derecho prevalecen las leyes generales por encima de las leyes deportivas. Si se vulnera un derecho del Barcelona, como será el caso si hay sanción sin una sentencia condenatoria penal previa, la justicia dará la razón al Barcelona en su demanda de una indemnización que no bajaría de los 100 millones de euros: los premios por participar en Champions (calculando a la baja) más lo que dejaría de ingresar el club por patrocinios, ticketing o ‘merchandising’: cualquier jornada de Champions deja en la Barça Store millones de euros.
Los investigadores de la UEFA ya han visitado las oficinas. Ahora deben evaluar la situación y valorar si se exponen a una pérdida millonaria por vulnerar los derechos del club barcelonista. Ya hay precedentes que advierten al organismo del riesgo que corren.