En una jornada del brasileirao, Flamengo obtuvo una relevante victoria sobre Atlético Mineiro, pero la atención se desvió hacia los acontecimientos post-partido. Pedro, el delantero del equipo, manifestó su descontento por no haber ingresado al juego, incluso después de que se realizaran dos cambios en el minuto 65. Su actitud provocó indignación en el preparador físico del club, Pablo Fernández, quien terminó agrediendo al goleador durante una fuerte discusión. Como consecuencia, varios jugadores y los involucrados pasaron la noche en la comisaría prestando declaraciones sobre lo ocurrido. Según el periodista brasileño Vene Casagrande, esta situación habría fracturado definitivamente la relación entre los jugadores y el DT argentino, Jorge Sampaoli, llevando a los futbolistas a solicitar su salida y la del cuerpo técnico del club.
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