El ascenso meteórico del Inter Miami en la Leagues Cup, desde un bache de dos meses sin victorias en la MLS hasta su destacada entrada en los cuartos de final, ha sido inyectado con la magia indiscutible de Lionel Messi. En una impresionante exhibición dominical, Messi deslumbró a todos al anotar dos espectaculares goles y desempeñar un papel crucial en la victoria por penales sobre el FC Dallas. Sin embargo, en medio de la celebración de la afición rosa, una sombra se cierne sobre el equipo, ya que se ha confirmado la salida de un compañero de Messi, Nick Marsman, quien previamente había expresado su escepticismo sobre la llegada del astro argentino.
Marsman, un arquero neerlandés que tal vez no fuera ampliamente conocido por los aficionados, ganó notoriedad por sus controvertidas declaraciones sobre la incorporación de Messi al club. Sus cuestionamientos se centraron en la infraestructura del Inter Miami, señalando la temporalidad del DRV PNK Stadium y las cuestiones de seguridad en el recinto como factores que podrían no estar a la altura de recibir a una figura de la talla de Messi. A pesar de la posterior aclaración de sus comentarios, la dirigencia de las Garzas ha optado por rescindir su contrato tras su recuperación de una picadura de araña venenosa. Marsman, quien en sus dos temporadas con el equipo acumuló 30 apariciones y ocho porterías invictas, deja un vacío en el plantel que deberá ser cubierto estratégicamente.
