El regreso de Novak Djokovic al circuito es un acontecimiento destacado en el Masters 1000 de Cincinnati, donde se presenta como el segundo preclasificado después de una ausencia de dos temporadas debido a restricciones de ingreso al país. Djokovic, ansioso por competir nuevamente en este torneo y en el Abierto de Estados Unidos, donde no participaba desde hace dos años, expresó su entusiasmo por estar de vuelta en la cancha. A pesar de su derrota en la final de Wimbledon contra Carlos Alcaraz, el serbio reveló su capacidad para recuperarse y asumir su responsabilidad, reconociendo que perdió oportunidades cruciales en ese encuentro. Djokovic elogió el desempeño del joven Alcaraz, demostrando un tono respetuoso y sin minimizar sus logros. Su enfoque está ahora en el torneo de Cincinnati, donde su debut definirá su camino hacia el US Open.
Djokovic reconoce errores en Wimbledon y busca redimirse en Cincinnati.
