Con la negativa por parte de la FIFA a la puesta en marcha de la tarjeta azul en el fútbol profesional se inició la reunión anual de la IFAB, organismo que decide los cambios del reglamento en el mundo del fútbol.
Entre ellas, la IFAB aprobó que sólo el capitán de un equipo puede acercarse al árbitro en determinadas situaciones. Además de la introducción de períodos de reflexión para permitir que el árbitro solicite a los equipos que vayan a su propia área de penalti o aumentar a ocho segundos el tiempo límite de posesión del balón por parte de los porteros, de lo contrario la posesión revertirá al equipo contrario.
Se ensayarán y se seguirán probando las expulsiones temporales en el fútbol base y juvenil. Cualquier posible aplicación más amplia solo se considerará una vez que se haya revisado el impacto de estos cambios. Es decir, la tarjeta azul tendrá que esperar al menos un año más.
La IFAB decidió extender a otras competiciones el proceso de la FIFA en el que el árbitro anuncia públicamente las decisiones finales y la explicación después de una revisión del árbitro asistente de vídeo (VAR) o una revisión prolongada del VAR. Las competiciones que así lo requieran deberán pedir permiso de la IFAB y deberán comprometerse a seguir las directrices tecnológicas y de arbitraje de la FIFA.
Aunque los cambios entrarán en vigor a partir del 1 de julio de 2024, las competiciones que comiencen antes de esa fecha podrán implementarlos antes o retrasar su implementación hasta, a más tardar, el inicio de la competición siguiente.
(Tomado de MARCA)