El ex futbolista de Barcelona, Edgar Ié, se encuentra en una odisea inaudita. Hace poco, en febrero de 2024, el portugués fichó por el Dinamo de Bucarest tras quedarse sin equipo siendo Estambul Basaksehir su último club en carpeta. Ahora, que encontró una oportunidad de reivindicarse luego de su paso por Turquía donde fue apabullado por las lesiones y las sanciones que prácticamente no lo dejaron jugar, vuelve a perder el rumbo. Pero no es algo que se ve todos los días: habría enviado a su hermano gemelo a ponerse los botines y presentarse en la institución rumana para jugar por él. Increíble.
Su hermano, Edelino, también es futbolista; sin embargo, su carrera no ha sido exitosa. Se formó en las inferiores del Sporting de Portugal, pero luego jugó en el ascenso de ese país. La categoría más alta en la que jugó fue en la segunda división portuguesa, en el Braga B. Lógicamente, su presente lo tiene sin equipo, luego de su paso por el Tluchowia polaco a finales del 2023.
Por eso, todo parece ser conveniencia para ambos hermanos. Por el lado de Edelino, tener un club y jugar en la Primera División de otro país; y por el otro, se ve que a Edgar no lo acompaña la buena suerte en los últimos años y, si bien se desconocen los motivos, su deseo podría no estar en las canchas aunque sí tener goce de sueldo. La vía fue crear este engaño familiar.
¿Cómo surgió esta sospecha? Un periodista rumano, Daniel Sendré, comenzó con las teorías que darían el posterior paso a una explosión en los medios locales. Notó la rareza de que el futbolista solo hable portugués y no inglés, habiendo jugado en países como España, Italia, Francia, Holanda y Turquía; además, sumaría a las especulaciones las malas actuaciones del defensor desde su llegada a la Liga I.
Esta noticia tomó tal trascendencia que el propio Dinamo de Bucarest decidió investigar el caso. Florian Prunea, presidente de la institución, dio por sentado que estaban siendo engañados. “Fue la primera noticia que leí este domingo. Joder, parece surrealista. Me preguntaba si todavía estaría durmiendo. Y comencé a hacer llamadas telefónicas, a hablar con amigos y la noticia es cierta, no lo puedo creer. Nadie lo negó. Tiene un hermano gemelo que también juega al fútbol”, declaró a través del canal rumano Digi Sport.
Pero hicieron una prueba. Le pidieron al supuesto Edgar Ié que muestre su licencia de conducir y, para colmo, este se negó. Entonces, el club rumano estaría pensando en hacer una prueba de ADN al jugador, con el fin de confirmar su identidad. Si se comprueba que no es, el club podría perder hasta 8 puntos por tener a un jugador que no está en su plantilla.
Desde la Federación de Rumania se aclaró: “Si el jugador no es el verdadero que fichó por el Dinamo, podría haber sanciones”, pero las cosas pueden solucionarse de distinta manera. Queda claro que el Bucarest no tuvó intención en este hecho y estuvo siendo engañado, siendo esto un puntapié para no ser afectado. “Habrá que considerar la posibilidad, pero si el Dínamo demuestra que fue engañado, el riesgo de perder puntos no existirá”, afirmaron.
Edgar Ié, quien tuvo su paso por el club catalán pero únicamente en la Categoría B y en el Villarreal B, tiene un solo trofeo en su carrera con 30 años. La Supercopa de Turquía está en su palmarés, ya que tuvo como campeón al Trabzonspor en la temporada 2020/2021, club donde jugó desde el año 2019 hasta el 2022. Parece que después todo fue cuesta abajo: pasando a préstamo por el Feyenoord por un año, estar sin equipo y luego llegar al club turco donde no dio lo mejor. Actualmente, en el Dinamo, ni siquiera estaría su presencia física. De hecho, el club no lo convoca desde el 20 de abril, mientras se disputa el Grupo de descenso de la SuperLiga. Ni él ni su hermano tendrán una carrera futbolística viable después de esto, si es que se confirma la falsa identidad.