El reclamo lleva el ‘10’ a la espalda y juega en Qatar su último Mundial. Una entrada para el Países Bajos-Argentina se está pagando a 4.500 euros, cinco veces su precio oficial. La reventa ofrece el ticket para ver jugar a Leo Messi, el partido es el complemento para disfrutar del último Mundial del crack rosarino, el futbolista que más expectación levanta en lo que llevamos de competición y más después del zurdazo que regaló en su partido número 1.000. Ver en directo a Leo Messi es una experiencia única que se tendría que vivir al menos una vez en la vida, y eso es lo que piensan aficionados que han venido de diferentes partes del mundo, no únicamente argentinos.
La compra-venta de entradas está controlada por mafias asiáticas –chinas, nos aseguran– que exprimen al máximo que se trate de la última gira de Leo Messi con su selección, como si se tratara de la despedida de los escenarios de U2 o los Rolling Stones. Los paquetes VIP están teniendo muchísima aceptación también. Packs Premium que no bajan de 7.500 euros y que garantizan cena en palcos de honor mientras en el campo está el caviar de la noche, el futbolista que está viviendo esta Copa del Mundo más tranquilo, compartiendo con sus hijos, ahora más mayores, la experiencia del torneo.
Qatar se ha convertido en un gran parque de atracciones con el fútbol como hilo conductor. La apuesta del país para el Mundial ha sido crear diferentes áreas lúdicas con los restaurantes más reputados del mundo y hoteles de super-lujo con playas privadas que garantizan la presencia de un público de alto poder adquisitivo. Qatar explota la presencia de los grandes futbolistas del mundo con imágenes gigantes que cubren rascacielos cercanos a la Perla y Messi –curiosamente embajador de Arabia Saudí– es el principal motivo para viajar a Doha. Objetos de culto del mundo del fútbol, camisetas firmadas por los cracks Messi, Cristiano Ronaldo, Neymar y Mbappé, decoración con banderas y balones y multitud de eventos relacionados con el lujo más exquisito con presencia de esposas de los futbolistas.