Los adjetivos calificativos cada vez abundan menos para describir la envidiable carrera del tenista serbio Novak Djokovic (2°), quien este lunes derrotó 6-3, 6-4 y 6-4 al danés Holger Rune (15°) para acceder por 15° ocasión a cuartos de final de Wimbledon.
Pese a padecer dolores estomacales y recibir abucheos de los espectadores, el legendario balcánico, que no disfruta su mejor temporada, sacó a relucir una vez más toda su categoría y experiencia para deshacerse del talentoso nórdico, de 21 años y dueño de cuatro títulos, que ya lo había derrotado en dos oportunidades, en París 2022 y Roma 2023.
Inmediatamente después de la victoria en parciales corridos, el 24 veces campeón en torneos Grand Slam no pasaría por alto la incómoda situación, aprovechando la entrevista al pie de cancha para expresar su descontento: «Me estaban faltando el respeto, no lo acepto. Sé que hinchaban por Rune pero también era una excusa para abuchearme. He estado en el Tour por más de 20 años, conozco todos los trucos y cómo funciona. Sé perfectamente cuándo determinada gente aprovecha situaciones para molestar a un tenista».
«Prefiero centrarme en la gente respetuosa, que mostraron respeto, pagaron la entrada para ver el partido hoy, aman el tenis y aprecian el esfuerzo de los jugadores», continuó el siete veces coronado en el césped londinense, donde sumó su 96° triunfo para meterse por 15° ocasión entre los ocho mejores de la competencia.
Por último, el dueño de 98 trofeos, que en la próxima instancia enfrentará al australiano Alex De Miñaur (9°), se despidió con una ironía de la cancha central: «A los que respetan el juego, les deseo una buena noche. A los que no, quiero que sepan que no me van a desconcentrar, he jugado en ambientes mucho más hostiles. Goooood night».