Luego de su consagración en el ATP 500 de Beijing frente a Jannik Sinner (1° del ranking ATP), Carlos Alcaraz abrió su corazón y contó el difícil momento que atravesó en el último mes. Las declaraciones.
«Empezaré diciendo que los enfrentamientos con Jannik (Sinner) son buenos para el tenis porque siempre son partidos intensos, cerrados y de gran nivel», comenzó haciendo referencia a la rivalidad que protagoniza con el italiano.
«Ese tipo de partidos hacen que la gente comience a ver o practicar tenis. Eso es realmente bueno», siguió.
«Estoy orgulloso de mí por todo lo que he hecho durante el último mes. Ha sido intenso pero me alegra que haya terminado con un título en Beijing jugando un partido increíble», expresó sobre el esfuerzo en la última etapa del 2024.
«Mi entrenador se emocionó porque el equipo sabe lo que pasamos en los últimos meses. Fue duro dentro y fuera de la cancha. Gracias a ellos volví a sentirme contento y motivarme dentro de la cancha, jugando partidos y practicando», señaló cuando le preguntaron sobre las lágrimas de Juan Carlos Ferrero en la premiación del China Open.
«Después de la gira norteamericana, me sentía mal. No quería volver a tocar una raqueta por un tiempo, tampoco viajar», confesó haciendo referencia a su paso por el US Open y los Masters 1000 que componen el calendario en Norteamérica.
«Luego de hablarlo mucho, sabía que debía volver a entrenar y fortalecerme física y mentalmente para atravesar esos problemas. En el último mes trabajamos mucho dentro y fuera de la cancha para volver a sentirme bien», cerró.