En un partido amistoso disputado en el RCDE Stadium, Brasil venció a Guinea por 4-1 en un encuentro que careció de ritmo debido a la etapa avanzada de la temporada. Aunque el resultado fue secundario, el evento estuvo marcado por la campaña de la selección brasileña contra el racismo, luciendo por primera vez en su historia un uniforme completamente negro y realizando gestos de concienciación, como un minuto de silencio y arrodillarse antes del inicio del juego. A pesar de la supuesta superioridad de Brasil, les costó someter a la disciplinada Guinea, que jugó con un sistema táctico defensivo. Los goles de Joelinton, Rodryg, Militao y Vinicius sellaron la victoria para Brasil, mientras que Guirassy descontó para Guinea. Destacaron los momentos de juego a balón parado, en los cuales Brasil encontró éxito. Vinicius, a pesar de ser impreciso en el remate, logró un penal que consolidó su actuación.
Conciencia y victoria: Brasil lucha contra el racismo mientras aplasta a Guinea en el terreno de juego.
