La llegada de Lionel Messi al Inter Miami ha tenido un impacto sin precedentes en la MLS, y especialmente en la marca Adidas, que es la encargada de proveer la indumentaria para los 29 equipos de la liga. El acuerdo de 830 millones de dólares que tenía vigencia hasta 2030 podría requerir una revisión debido a la abrumadora demanda que ha generado la camiseta número 10 del astro argentino. La marca se ha enfrentado a un desafío sin precedentes en territorio norteamericano, con un volumen de pedidos nunca antes visto, lo que ha llevado a la suspensión temporal de la posibilidad de comprar las camisetas de Messi en su web oficial. A pesar de los esfuerzos por satisfacer la demanda, las equipaciones titulares y visitantes están disponibles únicamente en pre-orden y podrían tardar hasta octubre en llegar a los fanáticos. El Efecto Messi ha provocado un aumento extraordinario de la demanda de indumentaria de la MLS, estimado en 25 veces más de lo habitual, lo que ha desafiado la capacidad de producción de Adidas y ha generado una intensa tarea para asegurar que todos los fanáticos puedan obtener la anhelada camiseta.
