El delantero del FC Barcelona Robert Lewandowski reconoció este miércoles que si no hubiera salido este verano del Bayern de Múnich, habría seguido en el club bávaro “por obligación” y “no por alegría”, al mismo tiempo que confesó que vivió su “mejor época” en Alemania durante la etapa de Hansi Flick como entrenador del conjunto teutón. “Mientras Hansi (Flick) fue entrenador en Múnich, viví mi mejor época en el Bayern. Lo ganamos todo, pude cumplir mi sueño de conseguir la Liga de Campeones. Fue una superépoca”, señaló el delantero, de 34 años, en una entrevista publicada este miércoles en el diario Sport Bild.
Lewandowski fichó por el FC Barcelona en verano de 2022 tras ocho años en el club bávaro, y reconoció que el sucesor de Flick en el banquillo muniqués, Julian Nagelsmann, no fue un argumento para decidir su adiós. Además, reveló que si hubiera permanecido en Múnich, habría perdido la “alegría” por ser futbolista. “Claro que habría seguido yendo a trabajar, pero más por obligación, no por alegría. No quería esa sensación, no habría sido bueno ni para el club ni para mí”, sostuvo.
Sobre Thomas Tuchel y ante la “sorpresa” que le generó el cese de Nagelsmann, Lewandowski defendió la llegada al banquillo del Bayern de un “superentrenador” con “sello propio”. “Tuchel puede traer al Bayern muchos títulos, tanto esta temporada como en el futuro. Mientras el equipo siga desarrollándose, no habrá motivo para crítica”, explicó.
Asimismo, valoró la salida de Flick del Bayern. “Con él todo fue genial, mostramos un gran rendimiento y ganamos títulos, y también se fue al final. Desde mi punto de vista, fue un poco extraño, difícil de entender. Pero así es el negocio, yo solo formo parte de él”, lamentó. El delantero quiso elogiar también a Jurgen Klopp, su entrenador cuando era jugador del Borussia Dortmund y “padre adoptivo” desde que tuviera una conversación con él en septiembre de 2011, después de perder un partido de la Liga de Campeones contra el Olympique de Marsella.
“Sentí como si una figura paterna estuviera sentada frente a mí”, recordó, antes de confesar que también fue el técnico quien evitó su marcha al Manchester United con solo 22 años. “Hablé con Aki (Hans-Joachim) Watzke y Jürgen Klopp en el campo de entrenamiento. Quería ir al Manchester United. Pero me dijeron: ‘Ni hablar, Robert. Te necesitamos. Tienes que quedarte’”, concluyó.