Pep Guardiola, entrenador del Manchester City, destacó la influencia del dolor y la crítica en la motivación de su equipo durante la victoria sobre el Real Madrid.
Guardiola resaltó que jugaron con el peso de la eliminación del año pasado y el deseo de redimirse. Además, elogió la mentalidad de su equipo y afirmó que lo que hace grande a un club es estar constantemente en la lucha por los títulos.
También reconoció que no se puede ganar siempre y enfatizó en la importancia de llegar a las rondas finales y jugar finales para eventualmente ganar la Champions League.
En relación a la final, Guardiola evitó considerar al Manchester City como favorito y advirtió que sería «mala suerte» si pierden.
Afirmó que estar en la final es un placer indescriptible y que el rendimiento del equipo ha sido destacable.
Sobre el Real Madrid, Guardiola no quiso emitir un juicio definitivo y señaló que no le corresponde juzgar al club español.