Este domingo, Liverpool aplastó como local a Manchester United en un histórico 7 a 0. Tras la caída, Erik ten Hag tomó una decisión para ‘castigar’ a su plantel por la vergonzosa derrota. Según The Sun, ni siquiera esperó a marcharse del vestuario de Anfield.
Por la fecha 26 de la Premier League, Liverpool fue un pésimo anfitrión para Manchester United: lo aplastó por 7 a 0, con un gol de Roberto Firmino y dobletes de Cody Gapko, Darwin Núñez y Mohamed Salah.
El golpe fue duro para los Red Devils, no sólo por la goleada histórica, sino por el buen momento que atravesaban, con título en la Copa de la Liga incluido.
Ante ese panorama, Erik ten Hag no tuvo piedad con sus jugadores y les propinó un castigo en el vestuario visitante de Anfield.
Según informó The Sun, el entrenador neerlandés habría dicho que muchos no volverían a jugar bajo su gestión y aplicó un correctivo: le pidió a su plantel unos minutos de silencio para escuchar cómo rugían los aficionados de Liverpool festejando una goleada que quedará en los libros de historia de la Premier League.
«Estoy sorprendido porque, por lo que he visto en los últimos meses y semanas, este equipo es resistente y tiene una actitud ganadora. En la segunda mitad no hemos tenido nada de eso. No hemos seguido nuestro plan y no hemos hecho nuestro trabajo», analizó Erik ten Hag luego del encuentro.