Emelec atraviesa un nuevo episodio de tensión interna en la previa de su partido contra Deportivo Cuenca. El plantel decidió no concentrar, a pesar de que el presidente del club, Jorge Guzmán, aseguró públicamente que “no existe ningún problema” y que las obligaciones con los jugadores se encuentran al día, al menos hasta el mes de junio.
Guzmán declaró que la relación con la plantilla es “muy buena” y que lo ocurrido fue un simple malentendido: un pago que estaba previsto para el miércoles se completó un día después. Incluso señaló que tuvo “una conversación brillante” con los futbolistas y descartó cualquier tipo de discordia.
Sin embargo, la decisión de los jugadores refleja que no todos quedaron conformes con la explicación dirigencial. La falta de concentración genera incertidumbre en torno al ambiente del camerino eléctrico y deja abiertas dudas sobre la preparación del equipo para un compromiso clave en la LigaPro frente al conjunto morlaco.
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